El FC Cartagena, que alineó a los jugadores menos habituales, cumplió ayer el trámite en el partido de vuelta de los octavos de final de la Copa Federación ante el San Roque de Lepe y se clasificó para los cuartos pese a perder (2-0) en un choque marcado por la expulsión de Campins a la media hora de juego.
Tras el 4-0 a favor de los jugadores de Pacheta en el encuentro de ida y con un viaje de más de 700 kilómetros a sus espaldas, el objetivo del conjunto albinegro era claro, terminar el choque sin lesionados y pasar de ronda. Todo se cumplió.
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